El descubrimiento de la cueva de Lascaux en 1940 tuvo un profundo efecto en los artistas de la época. Para Georges Bataille, este fue el amanecer de la raza humana. El poder inherente a las imágenes de animales (ciervos, caballos, bueyes) nos devuelve a la cuna de la humanidad y su conexión con la naturaleza, así como a la invención del arte.
En 1951, Christian Dior usó estas pinturas rupestres, imprimiéndolas para su colección Ovale, imbuidas con toques de imágenes femeninas primitivas como Vilendorf Venus.
Fue esta feminidad salvaje y antigua asociada con la magia de la tierra lo que llevó a la directora de arte de las colecciones de mujeres de Dior, Maria Grazia Curie, a crear su primera colección de cruceros para una casa de moda. Así, la idea de una mujer toma forma, haciendo realidad este mensaje chamánico, este espíritu salvaje, casi animal, sobre el que Clarissa Pincolola Estes escribe en uno de los libros favoritos del diseñador "Correr con los lobos".
Maria Grazia Curie busca constantemente nuevas formas de abrazar y explorar el legado de Dior. Y son los lobos prehistóricos los que abandonan la cueva de Lascaux para tomar su lugar en los inusuales jacquards de seda, donde un ocre de color casi dorado contrasta con los negros. Las huellas dactilares femeninas, al repensar las formas originales, se convierten en lujosos productos bordados con lentejuelas en tonos terrosos.
Maria Grazia Curie usa la habilidad de Dior, reinventándola para contar su historia en formas perfectas. Una historia que cambia proporciones y longitudes para adaptarse al mundo moderno, en el que el deporte se mezcla con la alta costura, donde la tradición se convierte en una abstracción decorativa y donde el estado de los materiales ha cambiado.
Un homenaje a los instintos la lleva a las figuras de mujeres que decidieron esconderse en el desierto para comprender mejor sus lados más profundos y oscuros. Esta es la imagen de un artista como George O'Keefe que emerge de las arenas de Nuevo México, como una figura hierática que recoge restos. Esto es lo que escribe Vicki Noble en su "Mujer Shakti": "Quiero conocerme a mí misma, en la profundidad más sagrada, y en esta profundidad quiero conocer y sentir a los demás".
Maria Grazia Curie también presenta una interpretación pop feminista del tarot Vicki Noble para dar nueva vida al arte de la adivinación, amada por el Sr. Dior. La idea de que el olor de una persona es un reflejo de su alma se puede encontrar en el aroma femenino del icónico perfume Eau Sauvage. La huella esquiva de esta figura salvaje e inestable vuelve nuevamente a la mujer al pedestal en el centro del mundo.
